domingo, 15 de abril de 2012

Os voy a contar un cuento.

Os voy a contar un cuento. Pero no un cuento de princesas, un cuento más o menos normal. Imagina una chica ni guapa, ni fea, una chica del montón. Ahora, imaginar a un chico guapo, muy guapo, un chico de película. ¿ Ya os lo habeis imaginado ?, bien, pues mucho más guapo aùn. Imaginar que un día se ven, y por un instante, un cruze de miradas. Se conocen, hablan y tontean. Imaginar ahora que la
chica está colada por él, imaginar que él está interesado por ella. Ahora imaginar que él coje el rumbo y quiere más. Lo normal sería que ahora empezasen a salir, duraran mucho, y colorin colorado, este cuento se ha acabado. Pero no, imaginar que él juega a dos bandas. Ahora imaginar que un dìa quiere quedar con las dos, pero no lo consigue. Pero no imagineis que se va con nuestra chica, no no, imaginar que se va con la otra. Ahora debeis imaginaros a nuestra chica llorando,entrando en depresión y queriendo morirse. Imaginar que al cabo de unos meses, el chico quiere otra vez a la chica. Y para empeorar las cosas, la chica vuelve a caer. Imaginar que la chica sigue igual o incluso más enamorada de él. Pero ahora imaginar que la chica es la que juega a dos bandas, y se va con el otro chico.Ahora imaginar que es una historia real. ¿ Sería la tía una zorra ? ¿ Una puta ? ¿ Una tonta ? No señores, yo le llamaría una chica lista. Aunque se muera por los huesos de él, le ha dejado tirado,se ha ido con otro. Al fin y al cabo, a veces es bueno dar de su propia medicina.

No hay comentarios:

Publicar un comentario